Para Cesar Ángeles Caballero,
cálida brisa de amistad
y caballerosidad.
INTERMEZZO
“ La vita fugge e non s’ arresta un’ora”
Petrarca.
Cual árbol indiviso
ante el filo del destral/
se posan en las sienes
vehementes los inviernos.
El tiempo indefinible
nos abruma en soledad
de un follaje enamorado
que disipa en la maleza
su tristeza.
Puerto de mis ansias
fue tu cuerpo/ florecer
de juventud tus labios
y tus dedos.
Un hombre enamorado
del aire en que jadeabas
era yo en cada letra
de tu nombre/ Una flor/
era tu rostro mirándose
en un rio que mi cuerpo
recorría en gestos de
tu boca de nocturnos
inventados.
Yo vivía locamente
entre versos y mentiras
que también eran verdades.
Tú vivirás en el fuego
y en la luz que todo
lo consume/ en la idea
y la palabra/ en el ruido
y el silencio/ en el mar
de lo profundo/en el cielo
misterioso que aún me llena
el corazón de regocijo.
CONTRADICCIONES
Un hombre dice...
Soy hombre
inmensamente feliz.
La vida es algo invalorable.
Otro hombre dice...
Soy un hombre feliz.
La vida es bella.
Un tercer hombre dice...
Soy un hombre.
La vida tiene sus altibajos.
Un hombre que los escuchó decir
que eran hombres, piensa...
Soy un ser que habita
este planeta...
He aprendido a sobrevivir
con lo que me han dejado.
TRINO DE CENIZAS SUMERGIDAS
Para César Calvo y Martha Isarra,
en un nocturno
Farewell de voces.
1
Y un sábado al atardecer
me espera tu verso/una copa/
y un vino trenzado de aroma
y de color escanciara en tu boca.
Y juntos nuevamente
volveremos a brindar en
la magia de tu voz; /
canto, vino, poesía/
trino de cenizas sumergidas
en el agua/ en un enjambre
de apacible adiós.
2
Separados en la vida/
también la muerte nos
espera un abismo/
como un gato furtivo
que busca la mano
del amo para ronronear.
Descansando tú en la
húmeda tierra sepultado; /
sumergido yo entre las aguas
en mística armonía.
3
Entonces reposaras tranquilo
en tus ojos taciturnos/
lejos de las peñas denegridas
que ocultaban tu sonrisa.
Navegando en otros mares
también yo descansaré
de mis pesares/ de los
cuervos que siguieron tras
mis pasos tanto tiempo.
4
Hombre y tierra/
tierra y mar/
cantó Alberti en su
marinero terrenal...
Juntos hombres, tierra y mar
en esa ruta eterna
donde todo ha de acabar.
5
En un lejano puerto
distante ya el olvido
cubierto por la brisa
de un mar adormecido/
también ha de mirar
tu rostro entristecido/
el reino de las sombras
con sus hondos abismos/
que extiende su negrura
para hacernos llorar.
6
Descenderá el cielo
cual fugaz estrella/
un manto de ternura
que me lleve hacia el mar/
a ese llanto de sirenas
que canto Machado
despidiendo a su Guiomar.
Y cuando veas que mi rostro
de cristales azulinos
sonriendo y no llorando
navega por la eternidad/
reír enmudecido
en ojos de ternura/
será mi corazón en sepultura
quien te traiga hacia mí.
QUE DESFALLEZCA...
Que desfallezca
en el olvido
todo aquello
que me recuerde
tu ausencia.
VANA ILUSIÓN
Cuando eras niña
mi amor abrigaba la esperanza
de poseer tu amor.
Y ahora que tus pechos
se han hinchado de furor,
veo que la esperanza,
es como el fruto del árbol
que se mece
con el viento
tentando al vil ladrón
- que de un ligero soplo -
carga con mis ilusiones.
POESÍA Y VERDAD
De todos mis pensares supremos
yaces tú, en lo profundo,
cual una estatua muda en
sentimientos o herma en mármol
de huesos calcinados.
Ya no más tu risa huracanada
ni los vientos de tu aliento.
Dicen los poetas que la soledad
se suspende en el vacío; mi
madre, que la ausencia de mí
padre es tan solo un corazón herido.
(mas sabiduría que en la poesía/
hay en el corazón de una mujer
doblegada a la tristeza).
Ahora que la pasión ha cercenado
las ramas de mi alma en una
sola noche donde primaba la calma,
mi corazón en su blancura
ha dejado de latir.
Y ahora me dices...
que tienes que irte
que tienes que partir.
Cómo creer en un amor
que volando en otros vientos
nunca me enseñó a vivir
ni tampoco a morir
como es debido.
A pesar del tiempo transcurrido
y del todo que ha mudado
su pasado, nunca olvidaré
que me has amado/y tú no
has de olvidar el amor que
ya se ha ido.
LA BARCA
Cuando regreso de ti, Gabriela aponte
mi barca naufraga entre los riscos
y ya no hay más estrellas en tus ojos
ni la sal que curte mis labios
ni tu voz que ya se ha ido.
El viento que se aroma
en la arena de tus pies
se esparce como brizna
de recuerdos, como nardos
arrancados a tus labios
en suspiros.
Cuando regreso de ti
la luna con sus rayos
juguetea en el asombro
de tus senos asustados.
En mis manos dibujada
está tu piel, la blancura
que emerge de tu boca,
la brisa que apacigua
tempestades.
Vuelo de gaviotas que se
orillan en la espuma
escarada de las rocas,
es tu voz, mujer amada.
Nube pasajera, cielo azul,
leño que crepita atizonado
por mis manos temblorosas
es tu voz apagada de silencios.
Calles misteriosas
construidas con casas
fantasmales, buscan
asidero en nuestras vidas.
(Vuela mariposa/en la flor
azucarada que en tu boca se posa)
Ven a mí, solo una vez,
a beber de mí aliento.
Ven a mí, ven,
antes que mi barca
naufrague entre los riscos.
MENTIRAS RELIGIOSAS
“Porque ni aun sus hermanos
creían en él”
SAN JUAN 7,5
“Aquí yace una virgen
que no tuvo más hijos/
y un predicador hereje
que no tuvo otros hermanos”.
POESÍA...
“Todo poeta nuevo que nace toma
los “lugares comunes” y los
transforma, si es grande, en
lugares propios, pero no puede
volver a empezar desde el principio.”
PAPINI
“El poeta es un fingidor.”
PESSOA
“¿Qué es un poeta? ¿De qué sirve?
¿Qué hace? Es un charlatán.”
BYRON
“Componer en la secuencia
de una frase musical”
POUND
Poesía,
dolor en el confesionario
de la página en blanco.
La palabra perdurable
de aquel puñal furtivo
que a la idea acecha con
ternura.
La insensatez de la perseverancia
al borde de la locura.
El tiempo que se esfuma
entre el humo de un cigarro
y un tinto en una copa.
El cuerpo de las mujeres
que silencian un amor
en un secreto beso.
La libertad de vivir
en forma diferente.
Volver sobre la idea y darle vueltas
a la tuerca hasta escuchar
una sirena con su canto.
La forma más humana y digna de vivir.
SIN TI...
Sin ti puedo beberme un vino
en el panteras pensando en
Raquel/ conversando con Gabriela
Aponte/ recordando con Susana
o contándole a Cindy las durezas
de la vida o también de sus encantos.
Sin ti la vida es un rio que navega
entre las piedras y la arena/un
bosque donde el sol reverdece las
las hojas e ilumina los colores
de las flores.
Dicen que entre el Cordano, el
Carbone y el Queirolo he dejado
mil colillas de cigarros en poemas
de mi vida convertida en poesía.
Sin ti la luna sigue cayendo
sobre el mar como una
rosa desmembrada de una rama.
Sin ti se han desnudado nuevos
horizontes después de tanta lluvia
desbordada; /un cuerpo y su fragancia
se desnudan esta noche/y me
asombra que sin ti/haya alegría
en mi corazón.
DE PROFUNDIS
“Comme la voix d’ un mort que chanterait
du fond de sa fosse,
maîtresse, entemds monter vers ton retrait
ma voix aigre et fausse.”
PAUL VERLAINE
Hay un misterio indescifrable
orlas grises en tus ojos.
Ojeras de mar/
viento tempestuoso.
Isla, amor, ojeras, mar,
hueso, ballena,
lista indefinible
o arrecife de coral.
Una mano se despide
en ondas vespertinas
de la muerte como angustia
que lo abraza;
en llanto la tempestad
en calma en un rostro
desespera (en el alba y en la noche);
ajena a este sueño de vigilia
ajena a este sueño de vigilia
ríes, ríes, ríes...
con una sonrisa infantil
que perturba mi vivir.
En este sueño siempre está el dolor
y donde hay un dolor
naufragan los muertos.
CUESTIÓN DE IDENTIDADES
Tu voz al otro lado:
navíos sin destino
regresan del pasado.
Gritos sin ecos ni
respuestas son tus labios; /
desierto está tu vientre;/
voces sin memoria quedaron
en tu boca.
Tu voz al otro lado:
un largo vuelo de palomas
sobre un lecho sin palabras
ni momentos.
Tu voz al otro lado
se pierde entre jadeos
de sabanas extrañas
y promesas empolvadas; /
entre muebles y paredes
donde mudan de
cuerpos los vestidos.
Tu voz al otro lado
entre rosas pasajeras
y flores perfumadas.
Vergel de inútiles promesas,
verdad ausente, voz que no responde.
Aspas sin molinos
despiden las estrellas
en la soledad sin luna
de esta noche.
NARCISO
“El espejo quebrado en que Narciso
a si mismo se bebe y no se sacia.”
OCTAVIO PAZ.
I
El encuentro fue mágico,
repentino; era el hombre
que venía de las aguas
y hacia ellas regresaba.
Y contempló su rostro
ondinado y recordó
sus piernas al vientre
sujetadas; su cuerpo
contraído, los brazos
en alerta... indefenso.
II
En flor, en rio, arroyo o fuente,
hombres o animales de su imagen
degustaron, forjado por los
dioses fue su rostro y su condena;
barquillo a la deriva fue su cuerpo
soplado por el viento con desgano,
entre aguas ondulantes
que la madre apaciguaba
con su canto de sirena.
III
Las mañanas y las tardes
lo vieron orillarse hasta
su muerte; dibujados risos,
ternidulces labios, ojos extasiados
que pronto se cerraron:
el lago sonreía cuando él
se sonreía, y acogía sus lágrimas
cuando la pena en sueños convertida
cual diadema azulina
sobre el agua se formaba.
IV
Después todo fue sombras:
viento fugitivo, luna negra,
perdida lluvia, noche sin hogueras,
cielo sin estrellas, muerta la memoria,
espejo que se quiebra en las voces
y rumores de un lago agonizante.
LA VIDA BREVE
“Del viver ch’é un correré alla morte.”
Purgatorio, XXXIII, V. 54
DANTE.
La vida debería ser como
cruzar una calle camino
al trabajo, como una moneda
que cae en la mano del que
pide y no recibe;
sudar sin prisa; detenerse
en el tiempo sin que nadie
se pregunte porque nos detenemos;
humedecer un pan en el café
y reír sin que exista una razón;
sentir la brisa mientras el mar
sonríe y las gaviotas su
temor imprimen en la
arena sus cuerpos desgastados.
Ver los años como árboles,
los meses como ramas,
los días como hojas,
y sentir que en esa sabía
esta mi sangre, pequeños
ríos que a todos alimenta,
y ser yo agua que nutre,
gusano que se arrastra,
polvo en el viento,
hongo que fermenta,
follaje, hojarasca, arroyo,
nube, cielo, lluvia,
firmamento, todo...
Verdad de vida que
en otro se sustenta.
Quisiera renacer como un
relámpago de sueños,
y que la muerte me encuentre
sin que nadie le diga que
no estoy, en un parque,
camino a casa, hablando
con mamá del dinero que
aún le debo, llamando
a Gabrielle por teléfono,
escuchando a Jorge hablar
de Talleyrand o Robespierre,
y con sus manos blancas
mojando mis encías,
beber un vino sin que nadie
me interrogue el motivo.
La vida breve como el
gemir de amor de una mujer.
MADRIGAL
Dime amada
las ansias de tu boca
y seré en el mar lecho de rosas
en que se pose presuroso,
un beso ardiente
que en la flor de tus labios
y tus ojos de deshoje.
OBRA DE ARTE
Un Moisés o una piedad
no se forjó de un solo
martillazo.
LLAMARADA
Tocaron a mi corazón
una mañana
y cerré las puertas
aterrado.
¿Quién es?, pregunté tímidamente.
Soy la primavera/ el sol/
soy una flor y un jilguero /
soy la lluvia/ soy un árbol /
una ardilla / un celaje de arrebol /...
Era Dios quien me llamaba...
hecho flor, jilguero y lluvia,
árbol, ardilla y primavera.
Hoy el corazón de un hombre
yace en mi pecho,
ya marchito...
ya sin vida.
YO RESPONDÍ A TU LLAMADO...
Yo respondí a tu llamado
para que me vieras, oyeras
y lloraras...
y simplemente hoy
lamentas haberme amado.
RESURRECCIÓN
Yo no quiero, Señor, que se apiaden
los dioses de mi pena. Dueño soy
de este dolor, con ellos siempre voy.
Y así mi alma o mi espíritu resbalen
en pecado, sabré porqué se evaden
las almas de tu cielo. Sólo doy
de beber a aquellos que recalen
como yo en este tormento. Convoy
de cuervos traicioneros fue mi vida,
unos ya se han ido, otros van de ida.
Alberga el corazón una esperanza
fruto de amor que me ha llegado
dulcemente; como una suave lanza
que al corazón su hierro ha penetrado.
BAJO LA ARENA
I
Yo me orille desnuda
entre las aguas
II
Rasgadas vestiduras:
brisas salinas.
III
Un hombre sin rostro
me observaba:
musgo verde entre la piedra.
IV
Hoy me sumerjo entre tus brazos
cual esperado amante
que naufraga
entre la carne
dorada por el sol
de una dulce espera.
V
Toda mi mano desasida
y enséñame
los secretos que oculta
ese mar tempestuoso
que domina tu vida.
CADA HOGUERA...
Cada hoguera
que se enciende
es una herida irrestañable.
¿Porqué no encendemos
de una vez todo
este bosque y abrasamos
para siempre su verdor?
CAMINO DE CIEGOS
Hoy como otras veces
este lento caminar a ciegas.
Tropezando el día están
mis pasos/ y este cuerpo
devorándome por dentro
con la tarde en sus
pasos retardados; / un
camino envejecido de voces
y de sombras me quitan
el aliento.
Llegar es no llegar. Llegar
por todos los senderos
a poner en sueños la cabeza/
el cuerpo en su agonía yacija/
el corazón rasgado de este
modo y sin sustento.
El día es infinito en su silencio
como una carta sin destino/
como la arena que desciende
en la clepsidra en las horas
que preceden a la muerte.
Andar, andar a ciegas,
buscando pasos, las líneas
de un cayado dibujadas
en la muerte / un pedirle
a la memoria unos dedos
o una mano generosos /
un sediento itinerario
de esperanza.
MARCHITAS ILUSIONES
Por ti mi corazón/ loco aventurero/
atravesó montañas/ combatió molinos/
Quijote enamorado/ recorrió muchos linderos/
dejando tras de sí/ muchos caminos.
Con lanza en ristre/ viví mis emociones/
soñando con las nubes/ en lluvias de alegría/
henchida la razón/ de grandes ilusiones/
viviendo en la quimera/ de amarte de por vida.
Hoy que todo es sombras/ flor que se marchita/
oscurece el espíritu/ se perturba la calma.
Viene la angustia/ se quiebra el alma.
Sobre la tumba del amor/ yace una palma/
y un ramo de mirtos nos invita/
a vivir donde los muertos se dan cita.
QUIEN CONOCE DE CIELOS...
Quien conoce de cielos
y de abismos profundos/
desconoce el olvido...
más aún el perdón.
ENTRE SOMBRAS Y SILENCIOS
Yo tuve que leer
en tus silencios
ahora que me abruman
los pesares y se encienden
las tristezas entre sombras:
pero saldré otra vez
con mi frente victoriosa
y mi voz resonará
entre clarines y amapolas.
Perfumes de jacintos se
confunden con la brisa
que se templa, trayéndome
el aroma de los musgos
incrustados de las rocas
en intenso.
Los árboles han silenciado
sus hojas como si a tu paso
se espantara el viento.
RESPLANDOR EN EL AGUA
“Aquí yace alguien cuyo nombre
fue escrito en el agua”
Fascinado de luz y de belleza,
formo parte del paisaje donde
el sol ardiendo en rayos
caerá sobre la seca;
y las aguas, racimos ya cuajados,
tornarán al cielo; alisadas nubes,
en tupido aljófar , regresarán,
y, en serpenteante río,
descenderé de las montañas
con ímpetu salvaje;
serán mis aguas acantos espinosos,
de anteras borraré la tenue arcilla,
y no habrá flores ni abejas
ni foscos nidos de abejorros
entre piedras que anuncien primaveras;
brotadas a su suerte
quedarán las rosas
la hierba chamuscada por el lodo
también ha de sufrir mi paso agreste.
...
Inundaré los valles, los bosques,
los campos y las Vegas,
y, convertido en mar
- desbordante de alegría –
como Jesús resucitado
dormitaré por las mañanas;
ya de noche mis ojos se abrirán
para llenarse de silencio, de estrellas
de negrura misteriosa sin palabras.
PEQUEÑAS SUTILEZAS
A veces sueño con besar a las hormigas/
dejar que la polilla anide entre mis libros/
echarme con el grillo entre la hierba
y cantar al alimón/ pedirle a la cigarra
su guitarra y cantarle a las estrellas/
buscar una luciérnaga
y alumbrar el camino de los ciegos/
untar de miel con las abejas
la tristeza/ zumbar como las
moscas de alegría/ cubrir con la seda
del gusano a los desnudos/
brindar con el mosquito a carcajadas/
darle al piojo de mi sangre
su sustento/ rodar con el escarabajo
tras la bosta/
saltar como una pulga de emoción
al ver que los gorgojos comen de mi mano/
pedirle al escorpión su cola
puntiaguda y herir a la maldad en su costera.
A veces sueño con no despertar
de esas dulces sutilezas.